Gómez de Lecube, de futbolista a espía nazi
ualquiera que haya tenido la suerte de ejercer la profesión de futbolista, sabe que por muy prolífica o exitosa que sea su carrera se trata de un oficio efímero. Hasta hace unos años y, a pesar de ser un trabajo muy bien pagado, cualquier jugador sabía que rondando los 40