Un minuto para la eternidad
a Holanda de Michels y Cruyff es considerada como el máximo exponente del “fútbol total”. Esta forma de entender el juego tuvo sus precursores en la Hungría de los ’50 o la fina escuela austríaca encabezada por Hugo Meisl. Ese equipo bautizado como la Naranja Mecánica quedó en la retina