Fueron 34 zancadas y 16 toques de balón antes de perforar la portería del Compostela. Bobby Robson, un hombre que había visto mil cosas sobre un terreno de juego se echó las manos a la cabeza. No solo él, todo el mundo quedó impresionado ante semejante obra de arte.
Bueno todos no. Los futbolistas del Compostela que quedaron atrás en la galopada del “Fenómeno” iniciaron su particular vía crucis tras aquella noche que terminó con victoria visitante por 1 a 5.
Un gol que acabó en los juzgados
Durante aquella carrera repleta de potencia varios defensas le agarraron y trabaron, pero el trencilla Esquinas Torres decidió dar la ley de la ventaja. Menos mal, porque de haber señalado falta nos habría privado de uno de los mejores goles de la historia.
Meses después Nike, que promocionaba al delantero brasileño decidió utilizar este gol para uno de sus anuncios. William, Bellido, Passi, Fabiano, José Ramón, Mauro y Chiba, protagonistas involuntarios de aquel gol, decidieron denunciar solicitando un compensación económica por daños morales y perjuicio de su imagen como futbolistas.
Tras doce interminables años de litigio el Tribunal Supremo desestimó la denuncia, indicando que no había perjuicio alguno para los siete demandantes al tratarse de un anuncio que ensalzaba las virtudes de Ronaldo como futbolista y en ningún caso afectaba a la dignidad personal o profesional.