El 23 de junio de 1956 Les Corts vistió sus mejores galas para recibir al Botafogo con Garrincha a la cabeza. Estaban preparados para una gran noche de fútbol, pero terminaron presenciando una dantesca velada de boxeo entre culés y albinegros.
Boxeo en Les Corts
Este choque (nunca mejor dicho) tuvo que suspenderse en el minuto 63 por una multitudinaria pelea entre los futbolistas de ambos equipos, que soló paró cuando la policía saltó al césped y se los llevó a comisaría.
La tensión se mascó desde el principio y el partido fue de todo menos amistoso. La dureza con la que se emplearon fue más que sorprendente, puesto que no había nada en juego… Más allá del honor.
En el minuto 18 de la la segunda parte Andreu Bosch quedó tendido en el área contraria, al parecer debido a un puñetazo del guardameta Amauri. El masajista local, Ángel Mur, salió a la carrera para atenderle y también fue agredido. Fue la chispa que prendió la mecha.
Los asistentes pudieron ver ojipláticos como Kubala revivía sus tiempos como púgil noqueando a tres brasileños, aunque en los mentideros de la Ciudad Condal esa cifra fue aumentando según pasaba la noche, engrandeciendo aún más si cabe las dotes para el boxeo del húngaro.
Más de uno terminó la verbena de San Juan en el calabozo y con dolor de cabeza, mientras que el público se quedó sin poder ver la conclusión de un enfrentamiento que se llevaron los brasileños 0-2.
El Barça siguió disputando estos amistosos hasta 1961 cuando se enfrentaron a Atlético Clube de Portugal en un partido que sirvió para homenajear a Kubala.