Ambos equipos han desaparecido. La Agrupación Deportiva Almería lo hizo en 1982 y el Club Deportivo Málaga una década más tarde.
Corría la jornada 27 de la temporada 1979-1980 y ambos conjuntos debían medirse en la Costa del Sol, pero aquel 30 de marzo de 1980 no hubo fútbol en La Rosaleda ¿Qué sucedió?

El conjunto malacitano estaba cuajando una mala campaña y coqueteaba con el descenso. 15 días antes cayó 1-3 en un trascendental encuentro frente al Rayo Vallecano.
Tras el pitido final de un partido tenso y repleto de polémica arbitral, hubo lanzamiento masivo de objetos y amago de invasión del terreno de juego.
Desterrados por un día
El Comité de Competición clausuró La Rosaleda para el siguiente encuentro del CD Málaga, una decisión que sentó muy mal a sus dirigentes, alegando que no les habían dejado apelar la sanción se negaron a jugar en el destierro. Aquel duelo contra la AD Almería debía disputarse en el estadio El Mirador de Algeciras.
17:00 del 30 de marzo de 1980. Hora fijada para el inicio del encuentro. Los jugadores del equipo blanquiazul saltan al césped de su estadio acompañados por 5.000 aficionados que les muestran su apoyo.

Al mismo tiempo la AD Almería y el colegiado Sánchez Arminio perplejos en el campo del Algeciras. Una situación de lo más surrealista.
Las autoridades otorgaron la victoria al conjunto visitante, restaron 3 puntos a los malagueños y les impusieron una multa de 50.000 pesetas.
Lo más sorprendente del asunto es que a diferencia de otros encuentros resueltos en los despachos, no se le otorgó un resultado y ambos equipos quedaron en la tabla con un partido menos.
Aquella protesta por el “maltrato arbitral” le salió cara al conjunto malagueño. Terminaron colistas certificando su descenso a Segunda. Por su parte, la AD Almería quedó en décima posición manteniendo la categoría.

CD Málaga, la casa de los líos
Menos de un mes después de aquel partido fantasma el conjunto malacitano se vio envuelto de nuevo en otro jaleo extradeportivo.
El 27 de abril de 1980 la UD Salamanca, buscando escapar de la quema del descenso, asaltó La Rosaleda con un contundente 0-3.
Los salmantinos encarrilaron la victoria con tantos de Juan Carlos, Brizzola y Corominas en el primer tiempo.Hasta aquí todo normal.
Cuentan las crónicas de la época que los visitantes fueron de lo más efectivos. Convirtieron sus tres llegadas al área contraria en otros tantos goles.

La liebre saltó cuando un jugador del CD Málaga aseguró haber recibido una llamada telefónica desde Salamanca instándoles a dejarse ganar, puesto que, ellos ya estaban desahuciados
Los investigadores alegaron que había indicios de amaño y determinaron restarle dos puntos al Salamanca, así como la sanción a su entrenador, a Raúl Castronovo y Julio Orozco (interlocutores de la supuesta llamada) e inhabilitar al presidente de los salmantinos.
Todo quedó en agua de borrajas cuando un año más tarde el CSD revocó las sanciones por falta de pruebas.
Una temporada de lo más convulsa para el CD Málaga, que terminó perdiendo la categoría y que tuvo que afrontar su desaparición no mucho tiempo después.
