El gol lo marcó Fernando Torres y sirvió para cerrar la goleada 4-0 de España ante Ucrania en la fase de grupos del Mundial de 2006, pero casi tres cuartas partes del tanto hay que dárselas al zaguero catalán.
Corría el minuto 81, el partido parecía más que sentenciado con el 3-0 que reflejaba el luminoso pero los españoles no paraban de presionar y fruto de ella Puyol robó la pelota en el medio campo.
Empezó una conducción dejando a un rival en el suelo con una ruleta. Seguidamente la cedió para Torres y este para Cesc, que metió un pase en profundidad para que Puyol la amortiguase con la cabeza dejándola botando en la frontal del área. Allí apareció “El Niño” para clavar su trallazo junto a la base del poste. Poesía sobre un terreno de juego.