Los norirlandeses se impusieron 3-0 y con este penalti indirecto, nunca visto hasta la fecha, cerraron el marcador.
Corría el minuto 67 cuando entre el capitán del Tottenham Hotspur, Danny Blanchflower y la rutilante estrella del Burnley Jimmy Mcllroy idearon este curioso lanzamiento. El primero la tocó levemente hacia delante para que el segundo batiese al meta luso.
¡¡Alto ahí!! McIlroy entró antes de lo debido en el área y el árbitro mandó repetir el penalti. Esta vez no se anduvieron con fantasías y el atacante norirlandés la clavó en la escuadra con un derechazo.
Aquel penalti indirecto no fue legal, pero no cabe duda que inspiró a todos aquellos que después lo han ejecutado, Coppens, Cruyff, Messi…. Y por supuesto aunque de aquella manera Henry y Pires.