Si el equipo además termina llevándose el trofeo, esos afortunados entran con letras de oro en la historia del club.
En 1981 el Real Madrid, como este año, se enfrentó al Liverpool en la final, por cierto también en París, aunque en distinto escenario. En la presente edición en el Stade de France y hace 41 años fue en el Parque de los Príncipes.
Los ingleses se hicieron con su tercera «orejona» gracias a un gol de Alan Kennedy en el tramo final del partido. (Minuto 1:54″)
Casualmente el mismo protagonista repitió hazaña en 1984, cuando en Roma transformó el último penalti de la tanda que significó la cuarta Copa de Europa para el Liverpool. Un auténtico hito para el lateral «Red«.