Los dos finalistas tuvieron que superar cuatro rondas eliminatorias en las que empezaron 15 participantes, todos del área metropolitana de Londres, excepto el Queen’s Park Football Club que pertenecía a Glasgow.
Al club escocés le dejaron exento hasta semifinales con la promesa de que si se clasificaban disputarían la final un día después para poder hacer frente al viaje de vuelta. En dicha ronda igualaron sin goles con el Wanderers y los escoceses decidieron marcharse antes de disputar el replay.
Un duelo muy especial
La gran final fue un choque de estilos en el que se impuso el Wanderers gracias a un solitario gol de Morton Betts (que jugó bajo el pseudónimo A.H. Chequer) en el minuto 15. Este equipo practicó un fútbol más directo, frente al juego combinativo de los “ingenieros”.
Además del evidente cambio en las reglas del juego, la mayor muestra de cómo ha cambiado el fútbol desde sus orígenes es que en aquella primera final de la FA Cup los contendientes saltaron al campo con 7 u 8 delanteros. Nada de especular. Lejos de nadar y guardar la ropa los equipo independientemente de su estilo salían con todo al ataque ¿Igualito que ahora verdad?
El Wanderers, cuyo capitán era Charles William Alcock, inventor del torneo, fue el gran dominador de la década conquistando cinco títulos, todo los que tiene hasta la fecha.
Otra anécdota de aquel encuentro fue que nada más arrancar, el teniente Edmund Cresswell, jugador del Royal Engineers se fracturó la clavícula, pero como no había cambios aguantó en el campo estoicamente hasta el final del choque.
140 años después
Esto dos equipos no se han vuelto a ver las caras desde aquella primera final de la FA Cup. No obstante el Wanderers desapareció en 1887 y fue refundado en 2009.
Por su parte el Royal Engineers se ha mantenido con vida durante todo este tiempo gracias a los soldados en activo del ejército británico que han continuado vistiendo su camiseta.
Para conmemorar aquel partido ambos equipos se enfrentaron en un partido benéfico en The Oval a finales de 2012, 140 años después de la primera final de la FA Cup y en esta ocasión se impuso el Royal Engineers 2-1.