La imagen del futbolista de hoy poco tiene que ver con la de los jugadores de antaño. Como la noche y el día.
No me quiero detener en los bigotes, las barbas o las patillas, que son más cosa de las modas y tendencias que de algo propiamente futbolístico.
Cualquiera puede apreciar la diferencia física entre futbolistas de mediados del siglo XX y los actuales. Con el aumento de la exigencia física, el futbolista ha ido adquiriendo una imagen más “deportiva” hasta convertirse en auténticos atletas.

Borislav Mihaylov, lució uno de los peluquines más comentados en la historia del fútbol (Fuente: div.bg)
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