No creo que exista ningún jugador que no tenga el suyo. Del mismo modo tanto los clubes como sus aficionados tienen sus propios motes.
En muchos casos estas historias, que dan lugar a dichos motes, tienen un origen incierto o simplemente ficticio.
Una curiosa historia, aunque sin registros que prueben su veracidad, dará nombre a dos aficiones históricas de la competición argentina.
Según cuenta la leyenda, se organizó un encuentro solidario en beneficio de los leprosos del hospital rosarino de Carrasco, entre los dos máximos rivales de la ciudad. Newell’s Old Boys y Rosario Central.
Al parecer, Newell’s acepto la invitación, mientras que Rosario Central no se presentó al encuentro. Aquel plantón significó que los de Rosario Central fueran calificados de “Canallas”.
Por su parte los de Newell’s serían conocidos desde entonces como “Leprosos”. Estos apodos siguen en vigor hoy en día y, no solo han perdido su carácter peyorativo, se reconocen de forma cuasi oficial en las entidades.
Otro club histórico con un apodo singular es Racing de Avellaneda. Tras enlazar dos campañas consecutivas sin conocer la derrota y apenas concediendo unos pocos empates, se decía de ellos que eran una «Academia» de fútbol. Más de 100 años después se sigue conociendo por este mote al club.
«Animales» sobre el verde
Un club con un apodo de los que denominaríamos regionales es Aldosivi FC. Fundado en Mar del Plata rápidamente adquirieron el sobrenombre de el «Tiburón» de tiburón ¿Por qué se eligió un escualo en lugar de un calamar?
Seguramente porque impone bastante más a los rivales el tiburón de 20 metros de longitud que sacan al césped cada domingo sus aficionados.
Argentinos Juniors. El club en el que debutó Maradona. Es conocido como “El Bicho” o «Bichos Colorados». Este sobrenombre tiene su origen, como en muchos otros casos, en la prensa.
Durante la década de los 50 empezaron a referirse a sus jugadores con ese término que no tardó mucho en afianzarse. El club también es conocido como «El semillero del mundo», debido a su prolífica cantera de la que han salido además de «El Pelusa», Fernando Redondo, Juan Román Riquelme, José Pékerman o Esteban Cambiasso entre otros reconocidos futbolistas.
Con 117 años de historia el Atlético de Tucumán, es el club más antiguo de esta ciudad del noroeste del país. Al igual que ocurre en España con el club más veterano de la península ibérica, tiene el honor de ser reconocido como «El Decano».
Banfield es conocido como “El Taladro” porque durante su época más gloriosa perforaba una y otra vez las mallas rivales. Una vez más el apodo tiene su origen en la prensa, concretamente fue el diario «El Pampero» el primero en llamarles así.
La prensa tira de ingenio
«El Fortín», es el sobrenombre que recibe Vélez Sarsfield y en este caso se entremezclan un par de historias para dar ese apodo.
En su estadio se jugó en 1928 el primer partido con iluminación artificial de Argentina. Esas cuatro torres de iluminación sirvieron de inspiración al periodista Hugo Marini que uso el símil de fortín como si de atalayas se tratase. Fue un campo casi inexpugnable.
Por su repercusión internacional, los más conocidos son los motes de los dos grandes, a los que haré mención una vez más.
Boca Juniors recibe el nombre de «Xeneize«, que en el dialecto de la región de Liguria significa genovés, en referencia a los inmigrantes genoveses que fundaron el club de La Bombonera a comienzos del siglo XX.
Sus vecinos y máximos rivales, River Plate conocidos como «Millonarios«, fruto de las grandes inversiones económicas que realizó el club en los años 30 para fichar a los mejores jugadores.
Además de esto son conocidos como la «Gallina», ya que tras la inesperada eliminación del club en la Copa Libertadores de 1966 alguien soltó una gallina tras la portería de «Loco» Gatti.
Estudiantes de La Plata es conocido como “Pincharrata” pero su origen no está nada claro y existen varias versiones. Se dice que durante sus inicios formaban parte de la plantilla varios estudiantes de medicina, que hacían sus prácticas con roedores.
Otros en cambio cuentan que se debe a un seguidor muy humilde del club, Felipe Montedónica, que cazaba ratas con un pincho en el mercado de La Plata en el que trabajaba con apenas 13 años.
Apodos para todos los gustos
Los seguidores de Belgrano son conocidos como “Piratas” debido a que en una ocasión robaron las banderas de la hinchada de Racing de Córdoba. Otros dicen que surgió a finales de los ’60 porque la afición acompañaba en masa al equipo y sus excesos eran comparables a los cometidos por los corsarios en ultramar.
Los parroquianos del Colón son conocidos por el sobrenombre de «Sabaleros», ya que, la zona en la que se encuentra su estadio está muy cerca del río Salado y muchos de sus seguidores se dedicaban a la pesca del sábalo. Un pescado autóctono de este río.
Defensa y Justicia tiene como símbolo el halcón que les da nombre y que representa a la empresa de transportes que les patrocinaba. También adquirieron sus colores. Verde y amarillo.
Otro club que adquirió su apodo por el patrocinador es Godoy Cruz, conocidos como “Tombas” por el patrocinador. La bodega de Antonio Tomba, que cedió unos terrenos al club.
Club Atlético Huracán tiene como símbolo y como apodo “El Globo” por sus vínculos con el ingeniero Jorge Newbery, famoso piloto de globos aerostáticos de principios del siglo XX. Motivo por el que sus aficionados son “globitos” o “quemeros”.
Motes para todos
A San Lorenzo de Almagro se le reconocen dos apodos. «El Ciclón», en contraposición a sus vecinos de Huracán, ya que, según la definición este fenómeno meteorológico abarca más espacio que el de su rival.
También se les conoce como «Cuervos», herencia del hábito de su fundador, el sacerdote Lorenzo Mazza.
Otro mítico es San Martín de Tucumán. A diferencia de sus vecinos, estos eran de origen más humilde por lo que se les llama “Ciruja”(vagabundo) o «Verduleros», por su cercanía al mercado popular de la ciudad.
Talleres de Córdoba tiene un apodo mucho más simple, conocidos simplemente como la T, (te) en referencia a su inicial. Menos extendido está el termino «Matadores». Herencia de antiguos récords de épocas más gloriosas del club.
Por último, voy a recordad el apodo de Club Atlético Unión, a los que se conoce como “Tatengues” en referencia a la jerga popular de la zona.
Tatengue significa persona de bien, en referencia a su posición social, ya que, se ubicaban en el centro de la ciudad, poblada por las clases más pudientes.
Estos son solo algunos ejemplos. Hay muchos más. Tantos como clubes argentinos.