El 31 de marzo de 1976 nació una de las mayores rivalidades del fútbol europeo. Aquel día se midieron por primera vez sobre el césped del Santiago Bernabéu el Real Madrid y el Bayern de Múnich.
Este duelo lleno de tensión y polémica correspondió a la ida de las semifinales de la Copa de Europa. Finalizó 1-1 y pasó a la historia por la triste actuación de “ El loco del Bernabéu”.
¿Quién fue este personaje os preguntaréis? Un espectador que airado por un penalti no pitado a favor de los blancos decidió saltar al césped y agredir al árbitro tras el pitido final.
Un loco anda suelto
Tras golpear a Erich Linemayer fue reducido por Sepp Maier y detenido por la policía, pero mientras era custodiado por las autoridades logró escabullirse. Aunque las malas lenguas aseguran que la huida tuvo mucho que ver con la displicencia de los agentes.
Al parecer este hincha acudió al estadio junto a su mujer embarazada y, tras una supuesta pena máxima no señalada a Santillana decidió bajar desde el segundo anfiteatro hasta el césped para mostrar su descontento con un tremendo puñetazo en el rostro del colegiado.
“El loco del Bernabéu” salió indemne de su agresión, pero no el club, que vio como le clausuraron el estadio y tuvo que jugar las dos siguientes eliminatorias europeas lejos de su feudo. La UEFA se apiadó tras varios recursos y redujo la sanción inicial de un año de exclusión a los dos partidos de destierro.
Además la grada del templo merengue fue separada del terreno de juego por una valla para evitar futuras invasiones. Para más inri los blancos perdieron la eliminatoria en tierras alemanas, tras caer 2-0 en el último duelo europeo de toda una leyenda como Amancio Amaro. Acababa de nacer la rivalidad eterna entre madridistas y bávaros.