Hay que remontarse a 1936, en plena Guerra Civil Española, para recordar esta historia a día de hoy inimaginable.
El 3 de octubre de aquel fatídico año la Real Federación Española de Fútbol suspendió todas las competiciones oficiales, autorizando a las territoriales a que organizasen los Campeonatos Regionales bajo su responsabilidad.
Hubo ciertas regiones en las que el conflicto tardó más en llegar y el balón siguió corriendo durante un tiempo. Este fue el caso de Cataluña, que prosiguió con su Campeonato y al que pidió unirse el Real Madrid.
Muchos futbolistas fallecieron en el campo de batalla o tuvieron que exiliarse. Por su parte los clubes en su mayoría cayeron en bancarrota por la inactividad. El fútbol era imposible en medio de la barbarie.
Petición denegada
El sindicato de futbolistas catalanes vio con buenos ojos la propuesta, pero su acérrimo rival, el FC Barcelona se negó en rotundo a la participación de los blancos.
Todos los clubes adscritos al Campeonato de Cataluña aceptaron la inclusión del equipo merengue, excepto los culés, que no querían ni pensar en la posibilidad de ver a su eterno rival campeón en “casa”, que además un mes antes del estallido de la guerra les había derrotado en la final de Copa .
Los azulgrana habían sufrido una durísima sanción durante la dictadura de Primo de Rivera y su presidente Josep Suñol había sido asesinado al comienzo del conflicto armado. Agravios que alegaron para tomar aquella decisión, así como que la posible inclusión desvirtuaba la competición.
Finalmente en lugar de aceptar al Real Madrid en el Campeonato de Cataluña, la Federación propuso a sus jugadores que se uniesen a otros clubes participantes, opción que declinaron.
Así el conjunto merengue, que llegó a instalarse en Cataluña con la esperanza de ser aceptado, no pudo competir durante el conflicto, dado que los únicos torneos que se disputaron fueron la Liga Mediterránea entre equipos catalanes y valencianos, así como la Copa de la España Libre, ambos durante el año 1937, este último título le fue reconocido al Levante en 2023.