Valencianistas y azulgranas se han enfrentado un total de 196 ocasiones en todas las competiciones nacionales y continentales.
El balance es favorable para los azulgrana con 93 victorias por 53 para los che. Los otros 50 enfrentamientos terminaron en tablas. Los culés han marcado 374 goles por los 290 del equipo taronja.
De los casi dos centenares de duelos entre ambos conjuntos , tres han sido en finales de Copa. Todas ellas cuando el torneo se jugaba bajo la denominación de Copa del Generalísimo.
En las ediciones de 1952 y 1971 el triunfo fue para los barcelonistas, mientras que en 1954 fueron los valencianistas los que alzaron el trofeo copero.
Kubala, buque insignia culé
Tras una más que convulsa etapa en la entidad culé, la llegada del virtuoso futbolista húngaro Ladislao Kubala devolvió al equipo a la senda de los títulos.
Nos situamos en la temporada 51-52, fue la del recordado “Barça de las 5 copas”. El equipo logró todos los títulos que disputó, Liga, Copa, Copa Latina, Copa Eva Duarte y Copa Martini Rossi.
Como este año la final del torneo del KO se disputó un 25 de mayo en el antiguo Estadio de Chamartín ante 80.000 espectadores.
El equipo liderado en el campo por Puchades y desde el banquillo por Quincoces puso más que difíciles las cosas al recién coronado campeón de la regularidad.
En el primer minuto de partido Badenes aprovechó un desajuste en la zaga blaugrana para poner en ventaja a los suyos. Con un testarazo inapelable en el minuto 28 Badenes doblaba la ventaja.
Todo era oscuridad para los culés hasta que Kubala decidió tomar la batuta. En el minuto 40 un centro suyo lo remató Basora al fondo de las mallas.
La segunda parte fue un asedio azulgrana hasta que en el minuto 72, Jordi Vila, también con la testa ponía la igualada en el marcador.
La final se fue a la prórroga. En el 96’ Kubala ponía por primera vez en ventaja a su equipo y César hacía el 4-2 definitivo con un imponente cabezazo a un minuto del final.
Venganza che
El FC Barcelona había conquista tres Copas consecutivas y en la final de 1954 se citaban de nuevo con el Valencia en el Estadio de Chamartín, esta vez el partido iba a ser muy distinto.
Los valencianistas arrollaron al equipo azulgrana y conquistaron su primer título desde 1949. Tras este triunfo pasarían 13 años hasta que los che volviesen a saborear las mieles del éxito.
A los 14 minutos Buqué y Badenes trenzan una buena jugada. El balón cae en los pies de Fuertes que sube el primero al marcador.
Sólidos atrás y con mucho peligro en el ataque los valencianistas tuvieron varias ocasiones para ampliar su ventaja. Fue en el minuto 57 cuando Fuertes da un pase atrás en el área para que Badenes marque el segundo.
Sólo dos minutos después Mañó filtra un pase en profundidad y Fuertes bate al portero culé sin apenas ángulo. Gran gol. Partido cerrado. El título viajó a Mestalla.
Bálsamo copero
La década de los 70 fue una montaña rusa para la entidad culé. Llevaban 3 años sin celebrar ningún título (desde la archiconocida “final de las botellas” de 1968. En 1969 habían perdido la final de la Recopa contra un sorprendente Slovan de Bratislava.
Menos de dos meses antes de esta final de Copa, habían perdido la Liga precisamente ante el Valencia, cuando todo se les había puesto de cara con la derrota che en Sarriá.
Sensaciones completamente opuestas vivía el valencianismo. Con Di Stéfano en el banquillo acababan de levantar su 4ª Liga, 24 años después de la anterior, y, estaban ante la gran oportunidad de conseguir su primer doblete.
Las dinámicas de ambos equipos estuvieron muy presentes durante los primeros minutos del encuentro. En el 21 un fallo en cadena en la zaga culé terminaba en pena máxima transformada por Claramunt.
Con ese resultado se llegó al descanso. En la reanudación la defensa barcelonista volvía a hacer aguas a la salida de un córner. Paquito muy oportunista marcaba el segundo para su equipo.
Los che se las prometían muy felices, tenían un asa de la Copa agarrada, pero los azulgrana sacaron fuerzas de flaqueza. Fusté que había entrado en la primera mitad por la lesión de Marcial, recortó distancias con un potente disparo de falta directa en el 51’.
Veinte minutos después llegaba el empate por mediación de Zabalza (el héroe culé aquella noche) con un lanzamiento desde fuera del área. El minuto 71 fue fatídico para los che, que se quedaron con uno menos tras la expulsión de Sol por protestar.
La final se iba a la prórroga. En ella ambos equipos intercambiaron golpes hasta que en el minuto 100, de nuevo Zabalza, tras un barullo en el área marcaba el 3º para los culés.
Poco duró la alegría. Dos minutos después un magnífico testarazo de Valdez hacía inútil la estirada de Miguel Reina.
Así se llegó al minuto 113. Fusté filtra con el exterior un genial pase al hueco para el desmarque de Alfonseda. Éste dribla a Abelardo y empuja el balón mansamente para dar la victoria a los suyos.
Un Barcelona en horas bajas volvía a darle una alegría a su afición en casa del eterno rival.
La historia les espera
En el año de su centenario el conjunto valencianista quiere volver a levantar un trofeo 11 años después.
Hasta la fecha han jugado más finales (10), que títulos conseguidos (7). El último de ellos frente al Getafe en el Vicente Calderón en 2008.
Los culés también quieren hacer historia consiguiendo la quinta Copa consecutiva, algo que no ha logrado ningún equipo español hasta la fecha.
Ya son los reyes de Copas con 30 títulos y quieren seguir ampliando su palmarés en el torneo del KO.
En 2014 perdieron la final ante el Real Madrid. Desde entonces han ganado 4 títulos y han superado 24 eliminatorias. Números que evidencian su hegemonía en la competición.