Fundado en 1968, permaneció en activo durante dos décadas conquistando las tres primeras ediciones de la Copa de la Reina entre 1983 y 1985, así como la disputada en 1981, que no cuenta con el reconocimiento oficial de la Real Federación Española de Fútbol.
Sus inicios no fueron nada sencillos. El club nació en el seno de la academia Karbo, ubicada en el humilde barrio coruñés de Os Mallos y, su primera gran hazaña fue vencer a un equipo masculino en la inauguración de un campo de fútbol. Aquella victoria no supuso ningún título, pero obtuvieron un premio mucho mayor, el reconocimiento social.

Pasito a pasito
En 1981, antes de la fusión con el Deportivo de La Coruña pidieron jugar un partido en Riazor, pero el permiso les fue denegado tanto por Ayuntamiento como por directiva por el precedente que se podría crear.
Cuentan, que el motivo real para la negativa era que los chicos les tenían cierta envidia, ya que, ellas lograban llevar más gente a las gradas del coliseo blanquiazul.
Ese mismo año se hicieron con su primer título de la Copa de la Reina, aunque no sea reconocido oficialmente, tras golear a Condal, Punta del Este, CF Barcelona e imponerse 2-1 en la final al Unión Risco de Las Palmas.

Ronda a ronda aplastaron a sus rivales con un balance de 20 goles a favor y solo 2 en contra. Tal era su fama que eclipsaron a un equipo masculino, que deambulaba sin plena ni gloria por Segunda División en aquellos años.
Para poder disputar aquel torneo fueron las propias jugadores las que tuvieron que conseguir una equipación y sufragar los costes de viaje y alojamiento, ya que, no contaron con ninguna ayuda ni por parte de la Federación (que aún no reconocía el fútbol femenino), ni por parte de las instituciones.

Directas al estrellato
Siempre con ánimo de superación y con gran espíritu competitivo fueron sumando gesta tras gesta hasta convertirse en un equipo prácticamente imbatible y, las primeras campeonas de un título oficial en España.
Así sumaron a su palmarés las tres primeras ediciones de la Copa de la Reina entre 1983 y 1985, hazaña que solo han repetido Levante UD y FC Barcelona.
Gran referente del fútbol femenino español en los 80, el Karbo se vio abocado a la desaparición a finales de dicha década debido a los problemas económicos, pero para siempre quedó su gran legado que sirvió de inspiración a las siguientes generaciones de apasionadas de este deporte.