Levante UD y Albacete Balompié luchaban por salir de la zona roja de la tabla, objetivo que ninguno de los dos clubes logró a final de temporada. El videomarcador (gran protagonista de la tarde) reflejaba 1-1, Gaspar adelantó a los visitantes y Culebras igualó la contienda al filo del descanso.
Corría el minuto 53 cuando el lateral Ian Harte (no Reggi) remató de cabeza y Ronny Gaspercic atrapó el balón, eso sí con los dos pies tras la línea de gol.
Ni de Reggi. Ni gol
El guardameta del Albacete dio un pequeño salto hacia delante y se lanzó al suelo mientras miraba al linier por si las moscas. Los jugadores locales se quejaron amargamente pero el colegiado Megía Dávila no dio validez al “gol”.
El técnico levantinista Bernd Schuster y su segundo Manolo Ruiz fueron expulsados por sus protestas, mientras la grada coreaba al unísono ¡¡Ha sido gol! ¡Ha sido gol!
Todo siguió con normalidad hasta que 20 minutos después de la acción en cuestión el videomarcador mostró la frase “El gol de Reggi ha sido gol”.
Todo el mundo se preguntó al final del encuentro quién había puesto la famosa frase y el club aseguró que se iba a abrir una investigación ante la amenaza de una sanción del Comité Antiviolencia, que finalmente quedó en nada. El caso es que no hay hincha granota que no recuerde aquel no gol de Reggi.
