En 1930 Uruguay fue sede de la primera Copa del Mundo de la historia y el Estadio Centenario, construido especialmente para dicho evento se convirtió en el epicentro del fútbol mundial.
A día de hoy es el estadio más grande de Uruguay, así como uno de los de mayor aforo (60.235 espectadores) de toda América.
Además del primer Mundial de la historia, ha sido sede de los Campeonatos Sudamericanos de 194, 1956 y 1967, así como de la Copa América de 1995, curiosamente todos ellos fueron ganados por la selección anfitriona.
Su nombre, Estadio Centenario, se debe al centenario de la primera Constitución de Uruguay. En él juega sus partidos como local la selección charrúa.
El primer encuentro se jugó el 18 de julio de 1930 y enfrentó a los celestes y Perú, con victoria charrúa gracias al gol de Héctor “El Manco” Castro.
En 1980 el Estadio Centenario fue la sede de la Copa de Oro de Campeones Mundiales, torneo para celebrar el 50º aniversario de la primera Copa del Mundo, en el que se enfrentaron todos los vencedores.
Al disputarse en diciembre la selección inglesa no acudió a la cita, siendo sustituida por Holanda. También este campeonato se lo adjudicó Uruguay.
La casa celeste
Hasta 2016 también fue la casa de CA Peñarol y, a día de hoy además de los partidos del combinado nacional acoge encuentros de gran calado como el Superclásico uruguayo.
En 1960 albergó el primer encuentro de la Copa Intercontinental entre CA Peñarol y Real Madrid.
El partido terminó sin goles y, en la vuelta los blancos se adjudicaron el trofeo tras vencer 5-1. Los “Aurinegros” se tomaron la revancha un año después frente al SL Benfica y en 1966 derrotando a los merengues.
También fue la sede para el encuentro de desempate del mismo torneo en 1967 entre Racing Club y Celtic de Glasgow, que terminó con victoria para “La Academia” y, cuatro años más tarde vio la victoria de Club Nacional de Football ante Panathinaikos FC.
Ha sido sede de la gran final de la Copa Libertadores en una veintena de ocasiones y también ha acogido el último partido del resto de torneos continentales como la Copa Interamericana, Supercopa Sudamericana, Recopa Sudamericana y Copa Conmebol.
Uno de los elementos más relevantes del Estadio Centenario es la Torre de los Homenajes. Mide 100 metros, funciona como mirador hacia el campo y ha sido declarado Patrimonio Histórico de Montevideo.
Un Mundial accidentado
Este templo del fútbol puede presumir de ser la sede de la primera final del más importante torneo a nivel de selecciones. El 30 de julio de 1930 Uruguay alzó la Copa Jules Rimet tras derrotar a sus vecinos argentinos 4-2.
Fue construido por operarios de diversas nacionales, de ahí que durante una época se le conociera coloquialmente como la Torre de Babel.
Se construyó en apenas nueve meses pero unas lluvias en Montevideo retrasaron las obras y por este motivo los primeros partidos del torneo se disputaron en el Estadio de Pocitos y en el Estadio Gran Parque Central.
De este modo la ceremonia de inauguración del torneo se tuvo que celebrar con éste ya empezado. De hecho el primer gol en la historia de la Copa del Mundo obra de Lucien Laurent tenía que haber sido en el Estadio Centenario.
La singularidad y misticismo entorno al Estadio Centenario hicieron que en 1983 la FIFA lo considerase Monumento Histórico del Fútbol Mundial. Único estadio que ha recibido tal honor.