Sucedió el 26 de junio de 1983. Real Madrid y FC Barcelona disputaron el partido de ida de la primera final de la Copa de la Liga.
“Lobo” Carrasco y Maradona pusieron el 0-2 entre el 51’ y el 57’, pero en otro intervalo de seis minutos Vicente del Bosque y Juanito desde el punto de penalti igualaron la contienda.
En aquella locura que se vivió durante 12 minutos sobre el césped del Bernabéu “El Pelusa” cuajó una de sus mejores actuaciones con la camiseta azulgrana, anotando uno de los mejores goles de su carrera.
Con un Madrid volcado, buscando el empate, tras la salida de un córner el “Lobo” se escapó en velocidad, cediéndosela a Diego antes de que el zaguero blanco llegase al corte.
Maradona tenía por delante 40 metros de carrera y al portero Agustín. Con pasmosa facilidad se marchó del portero y cuando parecía que iba a rematar a portería vio por el rabillo del ojo que llegaba Juan José.
Una obra de arte
El “10” se paró en seco y le recortó con frialdad para empujar mansamente el balón al fondo de las mallas, mientras “Sandokán” se estrellaba contra el poste.
Este gol de Maradona al Madrid es una de las contadas veces que el público del Bernabéu se ha puesto en pie por una acción de un futbolista del eterno rival.
Tres días después los culés levantaron el título tras ganar al Real Madrid 2-1 en el Camp Nou. Fue el año que el conjunto blanco cosechó 5 subcampeonatos.
También el Barça les derrotó en la final de Copa del Rey. Quedaron segundos en Liga tras perder en la última jornada con un gol de Tendillo que dio la salvación al Valencia.
En la primera final de la Supercopa de España perdieron ante la Real Sociedad y en la Recopa de Europa frente al sorprendente Aberdeen de Alex Ferguson.