Siendo exactos un hat trick no es “simplemente” marcar tres goles en un partido. Un purista dirá que el jugador debe anotar un gol con cada pierna y otro de cabeza y, que los tres tantos sean consecutivos, sin que haya otro goleador entre medias. Pocos en la historia han logrado efectivamente el “hat trick perfecto”.
También existe el “hat trick magnífico”, que consiste en anotar un gol de falta directa, otro de penalti y otro en jugada.
Pero…. ¿Cómo nació este término?
Su traducción literal al castellano es “truco del sombrero” y tiene su origen en el deporte nacional inglés durante el siglo XIX, antes de la irrupción del fútbol en las islas, el críquet.
En este juego es realmente complicado lograr tres puntos consecutivos. Cuando un jugador lo lograba le colocaban un sombrero elegante en la cabeza para hacer gala de su hazaña.
Era un símil adaptado del mundo de la magia, en la que los ilusionistas hacían aparecer y desaparecer objetos y animales en el interior de un sombrero de copa. Un complemento que en aquella época era un signo de distinción y elegancia.
La costumbre perduró en el tiempo y con la irrupción del fútbol en el Reino Unido se empezó a utilizar esta terminología. Así a finales del siglo XIX los futbolistas que lograban un triplete eran obsequiados con un sombrero por su club.
Poco a poco se perdió la tradición de distinguir al futbolista con un sombrero pero el término hat trick ha perdurado hasta nuestros días y ahora el que lo logra se lleva el balón del partido firmado por todos los jugadores.
El hat trick en otros deportes
En rugby, el primo hermano del fútbol, se considera hat trick cuando un jugador logra tres ensayos y en béisbol cuando se consiguen tres home run.
También se utiliza en deportes de motor como el automovilismo o las carreras de motos y significa que un piloto, además de ganar la carrera, logra la pole position saliendo el más adelantado en la parrilla y hace la vuelta rápida en la misma carrera.
Tampoco es sencillo hacer un hat trick en dardos, ya que, consiste en clavar los tres en el centro de la diana en la misma ronda. Ahí es nada.
Hat trick con mucha historia
John McDougall logró un 2 de marzo de 1878 el primer hat trick de la historia (del que se tiene conocimiento) en el duelo internacional que enfrentó a las selecciones de Escocia e Inglaterra.
Bert Patenaude fue el autor del primer hat trick en una Copa del Mundo al lograr los tres goles de la victoria de Estados Unidos sobre Paraguay en el Gran Parque Central durante la fase de grupos.
Algo más de tres décadas después, concretamente el 28 de noviembre de 1964 el escocés Tommy Ross logró el hat trick más rápido del que se tiene constancia (90 segundos) en el duelo entre su equipo Ross County y el Nairn County.
Curiosamente también un 28 de noviembre, pero de 1999, José Luis Chilavert se convirtió en el único portero en lograr un hat trick en un partido oficial. El meta paraguayo logró tres tantos en el 6-1 que Vélez Sarsfield le endosó a Ferro Carril Oeste.
El argentino Gabriel Batistuta es el único futbolista que puede presumir de haber logrado un hat trick en dos ediciones de la Copa del Mundo, ante Grecia y Jamaica. Curiosamente ambos encuentros se disputaron un 21 de junio, de 1994 y 1998 respectivamente.
La futbolista sueca Kosovare Asllani logró el 6 de febrero de 2021 el hat trick más rápido en la historia del fútbol femenino, logrando en apenas 154 segundos los tres tantos de la victoria 3-1 del Real Madrid ante el Valencia en un encuentro de la Primera División Femenina.
Con la friolera de 92 hat trick Edson Arantes do Nascimento “Pelé” es el futbolista que más tripletes ha logrado en la historia del fútbol, aunque hay que poner en cuarentena los datos porque las fuentes antes no eran tan fiables como en la actualidad y muchos de ellos han podido ser en partidos amistosos. Al brasileño le siguen en el podio, aunque a mucha distancia, Cristiano Ronaldo y Lionel Messi.