Una semana antes Jorge Valdano le había dado la alternativa en La Romareda.
Raúl González cuajó un buen partido, pero falló tres claras ocasiones y los blancos cayeron 3-2 ante un Real Zaragoza que se colocaba líder.
Lejos de perder la confianza en su pupilo, el técnico argentino le dio de nuevo la titularidad en la jornada siguiente. Nada menos que en el derbi madrileño.
Así el 5 de noviembre de 1994 el máximo goleador de las categorías inferiores del Atlético de Madrid debutaba en un derbi con la camiseta del eterno rival.
A los pocos minutos respondía a la confianza depositada en él. Primero forzando el penalti que abría el marcador y poco después haciendo un auténtico golazo. Colocando en la escuadra una gran asistencia de Michael Laudrup.
Fue el primer gol de Raúl al Atlético de Madrid (y su primero vestido de blanco) de los 11 que le marcó a su ex equipo a lo largo de su carrera deportiva.