Si hay un torneo dado a las “maldiciones” es la Copa del Mundo. Ningún campeón repite hazaña desde la legendaria Brasil de 1958 y 1962. Además en las dos últimas décadas el vigente ganador sufre una pesadilla.
El último campeón en superar la fase de grupos fue Brasil en 2006. Desde entonces ninguno ha logrado llegar a la fase de eliminatoria. En 2010 le ocurrió a Italia, en 2014 a España y cuatro años más tarde a Alemania. Así las tres últimas campeonas se han ido a casa a las primeras de cambio.
El grupo maldito
Desde la edición de 1982, cuando se amplió el número de participantes a 24 selecciones, el Grupo F ha quedado maldito. Ninguna selección que haya quedado encuadrada en dicho grupo ha logrado alzar el trofeo.
Y eso que por él pasaron grandes combinados empezando por la mítica Brasil de Sócrates y Zico en 1982, Inglaterra 4 años después, Alemania en 1998, Argentina e Inglaterra en 2002, Brasil cuatro años más tarde o Italia, vigente campeona en 2010, lo mismo que le sucedió a Alemania en 2018.
La que más cerca estuvo de lograrlo fue Argentina en la edición de 2014. La albiceleste alcanzó la gran final pero cayó ante Alemania.
El gafe de Jagger
Desde 1956 cuando se empezó a entregar el Balón de Oro, ninguna selección con el vigente ganador entre sus filas ha sido capaz de levantar la Copa del Mundo.
Al igual que existe la máxima de que con un entrenador nacional se logra el título, contratar un técnico foráneo nunca ha sido sinónimo de éxito en el Mundial y, ningún seleccionador ha logrado levantar el trofeo con un combinado distinto al país en el que nació.
Estas maldiciones mundialistas también recaen sobre el vigente campeón de la Copa América, que jamás ha logrado alzar la siguiente Copa del Mundo tras el éxito continental.
Desde que nació el Ranking FIFA en agosto de 1993 ninguna selección que ha llegado a la Copa del Mundo como líder ha tocado metal.
Existe otra constante en las participaciones mundialistas de México, Ningún equipo que haya derrotado a “El Tri” en la fase eliminatoria ha sido capaz de levantar el trofeo. Si lo logró Inglaterra en 1966, pero ganó a los aztecas en la fase de grupos.
Más reciente es el “gafe” de Mick Jagger. Equipo al que apoya, no logra el trofeo. Esta maldición arrancó en Francia ’98, cuando decidió animar a su país. Surte aún más efecto si el cantante de los Rolling Stones acude al estadio. Recordemos que mostró su preferencia por la albiceleste en 2010 y la vio caer 4-0 ante Alemania y estuvo apoyando a Brasil el día del “Mineirazo”.