Desde 1960 este torneo enfrentó al campeón de la Copa de Europa y de la Copa Libertadores. Una idea que la FIFA tomó de sus precedentes no oficiales de la década de los 50, Copa Río y la Pequeña Copa del Mundo.
La última vez que se disputó bajo esta denominación fue en 2004 y cinco equipos empataron en lo alto del podio con tres títulos: AC Milan, Peñarol, Real Madrid, Boca Juniors y Nacional.
Tras cinco años de incertidumbre, regresó en el mismo formato en 2005 y así seguirá hasta 2023 cuando está previsto un “mega torneo” con 24 participantes, que como el de selecciones se jugará cada cuatro años y, su primera edición se disputará en China. Ya sabéis…. Cosas del fútbol moderno.
Mucha pompa y purpurina
La historia venía de antes, pero con el cambio de siglo los mandamases del fútbol solo tenían ojos para monetizar y estrujar al máximo la gallina de los huevos de oro aún por explotar. Y así básicamente nació este torneo.
El Estadio Morumbi y Maracaná fueron las sedes del primer Mundial de Clubes en el que Corinthians se proclamó campeón tras imponerse en la tanda de penaltis a sus paisanos del Vasco da Gama, tras igualar sin goles en un tedioso partido.
Fueron ocho los participantes en aquel torneo: Manchester United, Vasco da Gama, Necaxa, Al-Nassr, Raja Casablanca y South Melbourne, campeones de sus respectivos continentes, a los que se unieron Corinthians como representante del país organizador y Real Madrid invitado por la FIFA. Se dividieron en dos grupos y el primero de cada uno de ellos accedió a la final.
Precisamente los malos resultados de los equipos europeos, incapaces ambos de colarse en la final, fueron uno de los factores por los que los gigantes del Viejo Continente miraron con recelo al Mundial de Clubes y, la edición que se iba a disputar en España al año siguiente fue suspendida. La quiebra del principal patrocinador también contribuyó a tirar por tierra un torneo del que ya se había realizado el sorteo.
Curiosamente Nicolas Anelka, el flamante fichaje del Real Madrid, que aún no había marcado en la Liga Española, fue máximo realizador del torneo empatando a tres tantos con Romario y, Edílson fue nombrado mejor jugador del torneo.
A finales de año se disputó la Copa Intercontinental, por lo que el año 2000 fue el único en la historia en el que hubo dos clubes campeones del mundo, Corinthians y Boca Juniors, que se impuso al Real Madrid el 28 de noviembre en Tokio gracias a un doblete de Martín Palermo.