En la campaña 2000-2001 la organización instauró las eliminatorias a partido único en el campo del equipo de menor entidad durante las dos primeras rondas del torneo. El CD Toledo se cargó a las primeras de cambio a un Real Madrid que comenzaba la «era Galáctica».
La revolución de los modestos
8 años después fue incluso más sangrante para los blancos. En dieciseisavos de final se midieron a un histórico del fútbol español, Real Unión, campeón del torneo en cuatro ocasiones, la última en 1927.
Los irundarras ganaron 3-2 en el Gal y pese a perder en la vuelta en el Santiago Bernabéu (4-3) se clasificaron para la siguiente ronda.
En el coliseo blanco se pusieron dos veces por delante en el marcador, pero el hat trick de Raúl culminado en el minuto 85, ponía el 4-2 y, parecía sellar el pase para los locales. En el 89’ Eneko Romo se erigió como gran héroe del Real Unión.
Durante la siguiente campaña se produjo una de las mayores debacles en la historia del Real Madrid. El Alcorcón goleó 4-0 a los blancos en Santo Domingo, en el archiconocido “Alcorconazo”
Pellegrini sacó un equipo de garantías, con futbolistas de la talla de Van Nistelrooy o Kaká, para remontar en la vuelta, pero solo pudieron ganar 1-0 al conjunto alfarero, quedando apeados de nuevo a las primeras de cambio.
La anterior eliminación de los merengues a la sufrida en la edición 2020-2021 a manos del CD Alcoyano, se produjo en la 2015-2016. Ganaron al Cádiz CF 1-3 en el Ramón de Carranza, pero fueron excluidos por alineación indebida de Cheryshev.
Qué noche la de aquel día
El primer equipo de tercera categoría en apear al Real Madrid fue el CD Toledo, un 13 de diciembre de 2000 en el Estadio Salto del Caballo.
Los blancos, vigentes campeones de Europa, habían caído 15 días antes en la final de la Copa Intercontinental ante Boca Juniors.
Obviamente el equipo dispuesto por Vicente del Bosque en Tokio no tuvo nada que ver con el que jugó en el feudo toledano.
Aún así era un equipo con totales garantías. De inicio formaron César, Hierro, Sanchís, Iván Campo, Corrales, Savio, Flavio Conceiçao, Celades, Solari, Rivera y Morientes.
Los “Verdes” fueron un auténtico ciclón durante el primer cuarto de hora de partido. En ese tiempo Israel (5’) y Cidoncha (14’) pusieron en ventaja al equipo local.
La conexión Quini-Israel volvió loca a la zaga blanca, que ni mucho menos vivió su mejor noche en tierras toledanas.
En el 19’ Savio recortó distancias, pero los locales en un heroico ejercicio de contención, bloquearon los espacios a los futbolistas merengues y el marcador no se volvió a mover.
¡¡Menudo lapsus!!
Después el pitido final se vivió el habitual contraste tras un partido trascendental. Los locales celebraron con algarabía la victoria, mientras que los madridistas abandonaron cabizbajos el Salto del Caballo. Todos menos uno, Flavio Conceiçao.
El centrocampista brasileño, en un tremendo lapsus, creía que había partido de vuelta y se dedicó a animar a sus compañeros camino de los vestuarios, hasta que alguien decidió contarle la cruda verdad. Claro ejemplo de la intensidad con la que afrontaron unos y otros aquel encuentro copero.
El CD Toledo cayó en la siguiente ronda al perder por la mínima ante el Rayo Vallecano, pero se dieron el gustazo de derrotar al recién nombrado mejor equipo del siglo, vigente de campeón de Europa y que esa misma temporada conquistó su vigesimoctava Liga. Toda una hazaña.
Son partidos como este Toledo vs Real Madrid los que dan visibilidad a un fútbol humilde olvidado normalmente por los medios y, engrandecen a la Copa del Rey.