Tras faltar a la anterior cita, disputada en Francia en 1938 y, al suspenderse las ediciones de 1942 y 1946 por la Segunda Guerra Mundial, “La Roja” regresaba al evento futbolístico por excelencia 12 años más tarde.
Empezaron con fuerza doblegando 3-1 a Estados Unidos e hicieron lo propio con Chile (2-0. El 2 de julio de 1950 se citaban ante los inventores el fútbol en Maracaná con un puesto en juego para la liguilla final.
Era el primer España vs Inglaterra oficial de la historia. En 1929 los españoles se llevaron una agónica victoria, 4-3, en el Metropolitano, que celebró con exceso de júbilo Alfonso XIII en el palco de autoridades.
Dos años después los ingleses se tomaron la revancha con un contundente 7-1 en Highbury. Cuesta encontrar otro partido en el que el extraordinario Ricardo Zamora encajase tal cantidad de goles.
Volviendo a Brasil. Esta era la primera participación mundialista de los inventores del juego. Estaban obligados a ganar tras su victoria ante Chile y la derrota por la mínima frente a Estados Unidos, no les valía otro resultado.
Fue un partido muy competido entre dos potencias futbolísticas, que decidió el gol de Zarra.
Una victoria de prestigio
Al comienzo de la segunda parte Gabriel Alonso colgó un balón largo que Piru Gainza cedió de cabeza para que su compañero Telmo Zarra, anticipándose al meta, perforase la portería inglesa.
Fue una victoria que sirvió de arma propagandística para el régimen franquista. Sobre el césped de Maracaná el legendario Matías Prats entrevistó al presidente de la Federación, que fruto del fervor del momento hizo unas declaraciones que le costaron el cargo ante las protestas del embajador británico en Madrid.
Más contundente fue el mensaje del día siguiente en el Daily Herald, publicando una esquela: “Nuestro afectuoso recuerdo al fútbol inglés, que falleció en Río de Janeiro el 2 de julio de 1950. Un numeroso círculo de amigos lamenta su dolorosa pérdida. R.I.P. Nota: El cadáver será incinerado y sus cenizas trasladadas a España”
Fue una victoria de prestigio, basada en dos pilares, el gol de Zarra y la actuación de Antoni Ramallets rebautizado aquel día como “El gato de Maracaná”, que una agilidad felina les negó el gol a los británicos una vez tras otra.
Hasta la fecha aquel gol de Zarra ha dado a España la única victoria frente a Inglaterra en un gran torneo. Cayeron 2-1 en la Eurocopa de 1980. Empataron sin goles en el Mundial 1982 y, los ingleses se llevaron el triunfo en la tanda de penaltis en los cuartos de final de la Eurocopa de 1996.