Los tres goles del ariete inglés fueron fundamentales para que su selección derrotase a Alemania y por fin alzase el ansiado trofeo.
Los alemanes se adelantaron en el 12’ por medio de Helmut Haller. 6 minutos después Hurst empató de cabeza. En la segunda parte Martin Peters puso por primera vez por delante a Inglaterra y Wolfgang Weber mandó el partido a la prórroga en el último suspiro.
Era el momento del “10”, que en el tiempo añadido puso patas arriba el viejo Wembley.
El “gol fantasma” más famoso de todos los tiempos
En el 101’ tuvo lugar una de las jugadas más famosas en la historia del fútbol. Hurst recibió un centro desde la derecha, la controló, se la acomodó y su disparo impactó en el larguero botando en la línea de meta.
Pese a las quejas de los alemanes el colegiado Gottfried Dienst validó el gol a instancias de su asistente Tofiq Bahramov, que no parecía tener ninguna duda de que había entrado.
Ya en el último minuto Hurst logró su hat trick y aseguró el título para la anfitriona con un zurdazo que se coló por la escuadra.
En la historia de la Copa del Mundo hasta 8 futbolistas han logrado un doblete en una final, los italianos Gino Colaussi y Silvio Piola en 1938, el alemán Helmut Rahn en 1954, Pelé y Vavá en 1958, Mario Alberto Kempes 20 años después, Zinedine Zidane dos décadas más tarde que el argentino y el último lo logró Ronaldo en 2002. Solo el por entonces delantero del West Ham ha celebrado tres veces en tan importante cita.