Dio cobijo al Arsenal durante 93 años (1913-2006), cuando los “Gunners” se mudaron al moderno Emirates Stadium. Un estadio el doble de grande y el doble de frío que Highbury.
Fue diseñado por el legendario Archibald Leitch, arquitecto cuya firma llevan otros grandes templos del fútbol británico como Anfield, Celtic Park, Craven Cottage, Goodison Park, Hampden Park, Old Trafford o Stamford Bridge.

Antes de instalarse en en su nueva asa, el Arsenal (fundado en 1886), disputó la mayoría de sus partidos como local en el Manor Ground, ubicado en la parte sur de Londres.
El orgullo de los “Gunners”
Inicialmente el equipo fue conocido como Dial Square. Al trasladarse al norte de la ciudad pasaron a llamarse Woolwich Arsenal y el 6 de septiembre de 1913 comenzaron a jugar en un nuevo estadio muy innovador y con gran capacidad para acoger a su enorme masa social.
El techo de Highbury fue destruido durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, tardando más de una década en poder reconstruirlo.

Llegó a tener una capacidad para 57.000 espectadores, que fue reducida hasta los 38.500 por imposición del Informe Taylor, que trató de erradicar la actividad de los hooligans tras la terrible tragedia sucedida en Hillsborough en 1989.
El Arsenal solía disputar los partidos de Premier League en Highbury, un estadio con las dimensiones más reducidas de toda Inglaterra (100×67) que favorecía enormemente su juego, embotellando a los rivales.
Highbury también era motivo de orgullo para los hinchas del Arsenal al considerar que su césped era el que mejores condiciones tenía en todo el país.
Durante algunas temporadas decidieron disputar los partidos de competiciones europeas en el viejo Wembley para poder albergar hasta 70.000 aficionados.

Rumbo al Emirates
El incesante crecimiento del club y la colección de éxitos cosechados durante la etapa de Arsène Wenger, hizo necesaria la ampliación de Highbury, pero era literalmente inviable por la cercanía de otros edificios al estadio.
A comienzos del siglo XXI la junta directiva decidió construir el Emirates Stadium a poco más de un kilómetro de su antigua casa. La 2005-2006 fue la última campaña del Arsenal en el fortín de Highbury.
Los aficionados vibraron con el equipo que alcanzó por primera vez en su historia la final de la Copa de Europa, sin recibir un solo gol en su feudo en la fase eliminatoria ante equipos de la talla de Real Madrid, Juventus y Villarreal.
La siguiente temporada la arrancaron en el Emirates Stadium, que entre otros símbolos mantiene el legendario reloj de Highbury.
Hay una parte de la afición que se resiste a que su estadio lleve un nombre comercial y lo siguen llamando Ashburton Grove, su nombre original antes del patrocinio.

La última hazaña en Highbury
Una vez demolido el templo de los “Gunners”, el 7 de mayo de 2006, se construyeron viviendas de lujo que rodean la plaza Highbury Square, lugar donde en su momento se ubicó el terreno de juego.
Poco antes de quedar obsoleto este mítico estadio fue escenario de uno de los grandes hitos de este deporte en las islas británicas.

En la 2003-2004 el Arsenal se convirtió en el segundo equipo en conquistar la Premier League sin perder un solo partido durante todo el campeonato. Hito que solo había logrado el Preston North End en la primera edición (1888-1889) de la entonces conocida como Football League.
En sus 93 años de historia acogió partidos de rugby, así como el combate por el título mundial de boxeo de 1966 entre Henry Cooper y Muhammad Ali.
Albergó doce encuentros de la selección inglesa entre 1930 y 1961, uno de ellos conocido como la “Batalla de Highbury”, disputado el 14 de noviembre de 1934 y, en el que “Los Tres Leones” derrotaron en un durísimo choque a Italia que era vigente campeona del mundo
Fue preseleccionado como una de las sedes para la Copa del Mundo de 1966, pero finalmente fue sustituido por el White City Stadium. 30 años después ni se contempló su presencia para acoger partidos de la Eurocopa al ser considerado demasiado pequeño.
