Como en la historia del mundo la capitalidad mundial del fútbol va cambiando según el momento.
Mediada aquella década la República Federal Alemana vivió su etapa de máximo esplendor, coincidiendo con la irrupción del Bayern de Múnich.
Alemania, epicentro del fútbol europeo
El «Gigante de Baviera» se hizo con tres Copas de Europa seguidas: 1974, 1975 y 1976. Además aquel equipo fue la base de la selección germana que encadenó la conquista de la Eurocopa y la Copa del Mundo en 1972 y 1974 respectivamente.
Todos los equipos alemanes dieron un salto de calidad y empezaron a copar las últimas rondas de las competiciones europeas. Este tirón solo lo aguantaron los ingleses, generando una pugna entre ambos por la supremacía continental.
Si hay “un año alemán” por excelencia es 1980. Durante la temporada 1979-1980 la RFA llevó como representante a la Recopa de Europa al Fortuna Düsseldorf, la Copa de Europa la disputó el Hamburgo, uno de los clubes más potentes del momento y, en la UEFA participaron Bayern de Múnich, Borussia Mönchengladbach, Kaiserslautern y Eintracht de Frankfurt.
«Los Potros» eran el vigente campeón del torneo, también los ganaron en 1975 y fueron subcampeones de Copa de Europa en 1977.
El peor parado fue el Fortuna Düsseldorf, finalista de la Recopa la campaña anterior, no logró pasar de dieciseisavos de final en la siguiente edición
En la Copa de Europa el Hamburgo tuvo un gran papel y llegó hasta la final, aunque no fue capaz de alzarse con el título, que fue para el Nottingham Forest.
Inglaterra rompe la tendencia
En las últimas cuatro ediciones de la máxima competición continental, un club inglés se proclamó campeón, Liverpool (1977 y 1978) y Nottingham Forest (1979 y 1980)
Los «Reds» y el Aston Villa alargaron el reinado inglés firmando 7 Copas de Europa en 8 años (1977-1984), una racha en la que solo se interpuso «El Dinosaurio» en la campaña 1982-1983.
El idioma oficial de la UEFA
Si hubo una competición en la que se vio la superioridad alemana en la 1979-1980, esa fue en la Copa de la UEFA. Los cinco participantes germanos alcanzaron los cuartos de final y en las semifinales del torneo solo se habló alemán, un hito logrado por primera vez y única hasta la fecha en el fútbol europeo.
Los cruces emparejaron a Stuttgart y Borussia Mönchengladbach de un lado y Eintracht de Frankfurt vs Bayern de Múnich del otro.
La primera eliminatoria fue muy igualada, venciendo los primeros 2-1 en a la ida, mientras que «Los Potros» lograron darle la vuelta al marcador en la vuelta.
En la otra semifinal los favoritos se impusieron por 2-0 en Múnich, pero contra todo pronóstico los de Frankfurt empataron la eliminatoria y todo se decidió en una apasionante prórroga que finalizó 5-1 a su favor.
Solo en 1972, en la primera edición de la Copa de la UEFA, se había visto una final entre dos equipos del mismo país. El Tottenham Hotspur alzó el trofeo tras imponerse al Wolverhampton Wanderers.
Lucha fratricida
La ida de la final se disputó en Mönchengladbach y los locales se impusieron 3-2 con un gol de un joven desconocido, un tal Matthäus, y doblete de Christian Kulik. Compañero de ambos era Ewald Lienen, recordado por haber sufrido una de las entradas más feas de la historia.
El Eintracht de Frankfurt se adelantó en dos ocasiones, pero «Los Potros» aguantaron y se llevaron el gato al agua a dos minutos para el final.
Dos semanas más tardes en el Waldstadion «Las Águilas» se coronaron gracias a un postrero gol y con algo de fortuna de Fred Schaub.
Este título europeo se convertía así en el más preciado tesoro conseguido por el Eintracht de Frankfurt. En el campeonato doméstico se notó el desgaste de ambos en Europa y finalizaron séptimo y undécimo respectivamente.
Finalistas en la quinta edición de la Copa de Europa, hasta 2022 este era el único título continental de este conjunto germano.